El reflujo gastroesofágico es una condición en la que el contenido del estómago regresa al esófago, provocando síntomas como ardor en el pecho, acidez, tos nocturna, dificultad para tragar y sensación de amargura en la boca. En muchos casos, esta condición está relacionada con una hernia hiatal, en la cual parte del estómago asciende hacia el tórax a través del diafragma.

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Cuando el tratamiento con medicamentos no es suficiente o los síntomas afectan la calidad de vida, es necesario considerar una intervención quirúrgica. La cirugía permite corregir la hernia, reforzar el esfínter esofágico y restablecer el funcionamiento normal del sistema digestivo.

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La mejora en la calidad de vida tras este procedimiento es significativa, ya que se eliminan los síntomas crónicos, se reduce la dependencia de medicamentos y se previenen complicaciones como el esófago de Barrett.

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Ideal para quienes llevan años padeciendo acidez constante, sensación de reflujo o molestias digestivas a pesar del tratamiento médico.